«Las nubes no arden», póster sobre el modelo SaaS para bibliotecas, archivos y centros de documentación

24 mayo, 2019 at 08:04

En marzo de 2018 un incendio quemó los 800 metros cuadrados de la oficina de Baratz en Madrid. Gracias a las nubes (y no de lluvia) al día siguiente se pudo seguir trabajando con «normalidad». La nube (de Internet) protegió la mayor parte de la información, documentación y desarrollos al no estar físicamente en el lugar del siniestro. Y es que «las nubes no arden» y por eso se pudo restablecer el trabajo de los empleados y clientes en pocas horas.

Cabecera Las nubes no arden

Fue una experiencia traumática que superamos también gracias a la comprensión y apoyo de nuestros clientes. Los accidentes no se esperan y llegan cuando quieren. Por eso queremos contar esta experiencia y los beneficios que el modelo SaaS (Software as a Service) ofrecido por Baratz, que combina alojamiento en la nube con las mejores aplicaciones y servicios de nuestros equipos, puede reportar a bibliotecas, archivos y centros de documentación.

Leer cuentos a los peques: ¿en papel o en soporte electrónico?

22 mayo, 2019 at 08:04

Una de las tareas cotidianas a las que nos enfrentamos diariamente es la de leer cuentos a nuestros peques. Es algo que puede ocurrir a cualquier hora y en muchas ocasiones lo demandan como paso imprescindible antes de quedarse dormidos. Por esto siempre nos preocupamos en buscarles una lectura adecuada, algún cuento que les pueda gustar y que esté indicado para su edad. Sin embargo, toda la importancia que le damos a la elección del contenido no la tenemos en cuenta para la elección del continente. No solemos tener en cuenta el soporte en la selección del libro y como vamos a ver a continuación sí que tiene importancia.

Cuando leemos un libro a los peques no solo hay que prestar atención al contenido

Según el estudio «Differences in Parent-Toddler Interactions With Electronic Versus Print Books» de Tiffany G. Munzer, Alison L. Miller, Heidi M. Weeks, Niko Kaciroti y Jenny Radesky  de la American Academy of Pediatrics (AAP):

«Los padres y los niños pequeños verbalizaban menos con los libros electrónicos, y la colaboración era menor. Los estudios futuros deben examinar aspectos específicos del diseño de los libros en tablets que apoyen la interacción entre padres e hijos. Es posible que los pediatras deseen continuar promoviendo la lectura compartida de libros impresos, particularmente para los niños pequeños y los niños más pequeños».

20 libros prohibidos hace tiempo y que ahora son realmente influyentes en la literatura universal

5 abril, 2019 at 08:03

Los libros son poderosos por su capacidad de transmisión de ideas y pensamientos. Hace un tiempo esto no estaba muy bien visto, y se llegó incluso a prohibir la venta de determinados libros e incluso su préstamo en bibliotecas. Dichos «libros prohibidos», por lo general, generaban controversia por su temática y por ir en contra de una serie de principios morales. Puede parecer que la censura de libros es algo del pasado, pero tristemente sigue siendo algo de actualidad

Los 20 libros influyentes en la actualidad que fueron prohibidos hace tiempo

Desde Academic Book Week han llevado a cabo una votación popular para saber cuáles han sido los libros prohibidos en el pasado y que se les pueden considerar como «influyentes» en la actualidad. Para la elaboración de la lista de votación han contado con la colaboración de librerías académicas de todo Reino Unido e Irlanda, además de con el Index Censorship. La votación no dejó lugar a dudas y coronó a «El origen de las especies» (1859) de Charles Darwin como el libro prohibido más influyentes.

Considerado como la base de la biología evolutiva, El origen de las especies introdujo la idea de «selección natural» y especiación. Este libro fue prohibido por primera vez en 1859 por la biblioteca del Trinity College de Cambridge, donde Darwin había sido estudiante. En 1925, Tennessee prohibió la enseñanza de la teoría de la evolución en las escuelas; la ley estuvo vigente hasta 1967. El libro también fue prohibido en Yugoslavia en 1935 y en Grecia en 1937.