La inversión económica en las bibliotecas públicas es una de las acciones y decisiones políticas más acertadas para la prosperidad de la ciudadanía. Ellas son un bien necesario e imprescindible para que las personas tengan acceso gratuito a la información, a la formación y al entretenimiento cultural. Y, por ende, una apuesta por el desarrollo de las personas y su bienestar social. Pero… ¿todo esto llega a las personas que nos gobiernan? ¿Conocen la importancia de las bibliotecas públicas para el crecimiento de los municipios, provincias o países que gobiernan?

Óscar Arroyo Ortega, Jefe de Servicio de Bibliotecas, Libro y Lectura de Castilla-La Mancha, ha elaborado el informe Fesabid «Universalizar los servicios bibliotecarios públicos en España», el cual ha contado con el apoyo de los miembros del Clúster Fesabid. Un interesante estudio sobre el marco legal que regula los servicios bibliotecarios públicos en España y una reflexión sobre las políticas bibliotecarias que los rigen. En él se aprecia una España de varias velocidades en cuanto a las sensibilidades políticas con respecto a los sistemas bibliotecarios:

«Como conclusión respecto a la realidad de las leyes bibliotecarias, cabe indicar que aquí como en otros ámbitos, también se aprecia una España de varias velocidades; aunque en este caso no siempre tiene que ver con la renta per cápita de los territorios y quizá más bien con las sensibilidades políticas sostenidas en el tiempo frente a la importancia de contar con sólidos sistemas bibliotecarios en los territorios».

También es destacable que, aunque el servicio bibliotecario público en España sea universal, cada comunidad autónoma rige e invierte de manera desigual en las bibliotecas públicas. Lo que puede ocasionar, tristemente, que existan bibliotecas de primera, de segunda e incluso de tercera. Lo cual se podría extrapolar a la sociedad en cuanto a los servicios bibliotecarios que reciben según el lugar de residencia de las personas. El propio autor del estudio comenta que «el mejor y más objetivo indicador para determinar de forma global la desigualdad ciudadana en el acceso a los servicios bibliotecarios es sin duda la inversión por habitante».

La desigual inversión de las bibliotecas públicas en España

En España, la inversión media por habitante en gasto corriente de bibliotecas públicas es de 10,20 euros, siendo Cataluña la comunidad autónoma que más dinero invierte con 16,42 euros por habitante y Canarias la que menos con 5,78. Una amplia horquilla económica que muestra la desigualdad de un servicio universal como es el de las bibliotecas públicas. Pero esta desigualdad no es únicamente entre bibliotecas, sino también con otros servicios públicos. Y es que, si la media de inversión es de 10 euros en bibliotecas públicas, es interesante saber que la media de inversión por habitante, por ejemplo, en las fiestas patronales es de 40 euros y en educación es de 993 euros.

«Universalizar el acceso a las bibliotecas significa apoyar económicamente. Más allí donde existen menos recursos. Más, por lo tanto, en los municipios más pequeños, llegando a ofrecer y soportar de forma íntegra los servicios bibliotecarios ofrecidos a los habitantes de municipios donde no es obligatorio contar con biblioteca municipal pero cuyos ciudadanos sí tienen derecho a servicios bibliotecarios públicos. Y esta labor de apoyo debe asumirse por parte de Diputaciones y/o Comunidades Autónomas».

Ahora bien, y conocidos los datos de Cataluña y Canarias, ¿cuánto dinero invierte cada comunidad autónoma en las bibliotecas públicas? A continuación, se muestra el ranking de las comunidades autónomas españolas que más dinero invierten por habitante en bibliotecas públicas.

1. Cataluña: 16,42 euros/habitante
2. País Vasco: 15,52 euros/habitante
3. Castilla-La Mancha: 14,12 euros/habitante
4. Castilla y León: 13,35 euros/habitante
5. La Rioja: 11,08 euros/habitante
6. Comunidad de Madrid: 10,77 euros/habitante
7. Comunidad Foral de Navarra: 10,72 euros/habitante
8. Principado de Asturias: 10,30 euros/habitante
9. Extremadura: 9,60 euros/habitante
10. Galicia: 8,93 euros/habitante
11. Illes Balears: 8,59 euros/habitante
12. Cantabria: 8,47 euros/habitante
13. Comunidad Valenciana: 6,80 euros/habitante
14. Aragón: 6,62 euros/habitante
15. Región de Murcia: 6,33 euros/habitante
16. Andalucía: 5,97 euros/habitante
17. Canarias: 5,78 euros/habitante

Otro elemento muy interesante para visualizar el mapa de desigualdades entre los distintos territorios es la distribución del gasto global en bibliotecas en función de las distintas administraciones públicas. A través de los datos de la figura 3 podemos extraer que como media, la inversión municipal en España alcanza el 68,23%, la inversión autonómica el 21,07% y el Estado algo más del 0,19%. Todo ello suma el 89,49% del total de la inversión. El resto corresponde a Diputaciones y a otras entidades, incluso de carácter privado.

Como punto final a esta publicación, comentar que, si hay voluntad política con respecto a las bibliotecas públicas, realmente se pueden hacer maravillas en el crecimiento personal y profesional de las personas. Porque las bibliotecas nunca deben ser consideradas como un gasto, sino más bien como una inversión de presente y futuro.

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