Las principales ventajas de contar con una biblioteca dentro de la empresa privada
Las empresas son un flujo constante de información y documentación. Elementos de vital importancia y activos estratégicos que garantizan el éxito de las organizaciones. Independientemente del tamaño de dichas compañías, todas tienen documentos, libros, revistas, bases de datos y distintos materiales físicos y online para que el trabajo informativo y de conocimiento se desarrolle de la manera más eficiente. Ingredientes necesarios e imprescindibles que posibilitan el dar forma y crear una unidad de información o biblioteca dentro de las empresas.
No nos referimos a meros almacenes de recursos y libros acumulados (en el mejor de los casos organizados) sin ningún criterio, como bien apunta este artículo. Si no a servicios vivos que aporten información y conocimiento, y, sobre todo, sean capaces de proporcionar valor añadido a los trabajadores de las empresas al cubrir sus necesidades informativo / documentales por el bien de la compañía.
De hecho, grandes organismos y empresas cuentan con sus propias bibliotecas con personal cualificado y experimentado que les ayudan a conseguir sus objetivos. Sobre todo, abundan estas bibliotecas privadas, y claramente bibliotecas especializadas, en sectores como el farmacéutico, el médico y el legal. Y no es algo nuevo, ya en 1992 se hablaba de este tema en una breve nota publicada en la revista El profesional de la información:
En un riguroso estudio realizado durante cinco años por Carol Kleiman en los EUA y que ha resultado en una publicación cuyo título es «Las 100 mejores profesiones a partir de los años 90», durante los próximos 25 años habrá demanda de bibliotecarios y documentalistas, especialmente por parte de las empresas.