Las bibliotecas buscan su futuro en la adaptación a la sociedad y a la tecnología
Sin duda que las bibliotecas tienen futuro, y lo tienen porque en su día a día están trabajando en él. Las bibliotecas son entidades que se han adaptado con el paso de los años a la tecnología del momento y a los cambios sociales, se puede decir que la adaptación al cambio y la búsqueda constante de la innovación son pruebas que tienen superadas.
Bien es cierto que aún queda mucho trabajo y que cada biblioteca es un mundo por la tipología de usuarios que pueda tener, por la colección o espacios que tenga, o por su tecnología. También es un mundo porque no todo el personal que trabaja en las bibliotecas es igual. Hay personal que está más predispuesto al cambio y salir de esa zona de confort de la que tanto se habla.
A las bibliotecas les queda un futuro lleno de lucha, trabajo, tecnología y puesta en valor del bibliotecario. Las bibliotecas son más que libros y lectura, son agentes dinamizadores de acciones culturales e intelectuales. Las bibliotecas no tienen miedo a la tecnología ni a lo digital, ya llevan años con ellos y hacen buen uso del “renovarse o morir”. Hicieron muy bien en elegir el camino de la renovación y el reciclaje continuo plasmado en la perfecta combinación de las ventajas tradicionales y las nuevas tecnologías.
Ahora solamente falta que sean valoradas y apreciadas como se merecen, como una organización y un bien indispensable para la sociedad. La voluntad política y la participación ciudadana, así como la búsqueda de alianzas con otras organizaciones, es clave porque su futuro depende en gran medida de ellos… ¡Hay que llamarles la atención!