IFLA Trend Report 2024: Las tendencias que transformarán el futuro de las bibliotecas

17 octubre, 2024 at 07:39

Las bibliotecas están inmersas en un entorno en constante evolución, donde las demandas de las personas, las tecnologías emergentes y los cambios sociales redefinen su papel. Ya no se limitan a gestionar información únicamente; ahora son agentes clave en la promoción de la equidad, el acceso al conocimiento y el desarrollo de nuevas habilidades. En este contexto, necesitan anticiparse a los retos de un mundo cada vez más conectado, móvil y digital. ¿Cómo deben prepararse las bibliotecas para estos cambios? El IFLA Trend Report 2024 ofrece algunas respuestas.

Principales tendencias IFLA bibliotecas

El IFLA Trend Report 2024 supone una importante actualización desde su anterior edición en 2013. Este informe ofrece una visión amplia sobre cómo las bibliotecas, y el acceso a la información en general, se ven afectados por tendencias globales, tecnológicas y sociales. No se trata solo de adaptarse a los cambios, sino de comprenderlos profundamente y ser parte activa en la creación de soluciones innovadoras que respondan a las demandas de un futuro incierto. Además, el informe proporciona herramientas y orientaciones para que las bibliotecas puedan anticiparse a los retos venideros.

10 consideraciones sobre el futuro de la biblioteca

14 octubre, 2021 at 08:06

Nunca parece llegar el futuro de la biblioteca, pero cada día que pasa forma parte de él. Pensar el futuro, repensar el presente y conocer el pasado es parte de la evolución bibliotecaria. Los tiempos cambian, al igual que la tecnología, las personas y los modos de acceso a la información. Mirar hacia ese futuro ayuda a que estas instituciones se adapten y sigan creciendo en utilidad y necesidad.

Futuro de la biblioteca

Desde Trànsit Projectes han realizado ese ejercicio de mirar más allá del día a día bibliotecario, y cuyo resultado final es un interesante decálogo sobre el futuro de la biblioteca. Un futuro donde la innovación analógica y digital se unen en perfecta armonía, y donde las bibliotecas seguirán facilitando datos e información sin importar el medio con el objetivo de propiciar la generación de conocimiento. Un futuro donde gana importancia la tecnología, pero cuyo eje central son las personas, profesionales y comunidades que las van a utilizar.

¿Sabes cuáles serán los soportes futuros para almacenar información?

6 octubre, 2016 at 08:01

Es difícil contestar a esta pregunta porque muchas veces miramos al futuro únicamente con la información que manejamos en el presente. De primeras podríamos decir que toda la información estará guardada en la nube. En grandes servidores que nos diesen acceso a toda nuestra información en cualquier momento y lugar, cosa que ya pasa en el presente. Pero hay algo en lo que no reparamos al contestar a esta pregunta, y es que hay investigadores que le quieren dar una vuelta de tuerca al tema del almacenamiento de la información y piensa en otros materiales que harán que en menos espacio se pueda guardar muchísima más información.

En el futuro se almacenará la información en átomos, ADN y cristales

Y es que los soportes para guardar de información cambian cada pocos años, y con ellos llega la revolución tecnológica. Por poner un ejemplo, antes todos los ordenadores llevaban disquetera para poder leer la información contenida en los disquetes. Luego los ordenadores introdujeron los lectores de CDs y de DVDs, los cuales estuvieron conviviendo unos años con la disquetera hasta que desapareció por completo. Ahora han pasado a mejor vida los lectores de CDs y de DVDs con los sistemas de almacenamiento que se conectan por USB y por el almacenamiento en la nube. ¿Y quién reemplazará al almacenamiento externo por USB y al almacenamiento en la nube?

Pues desde hace años hay varios grupos de investigadores, y grandes universidades y empresas, que buscan el soporte para guardar la información en el futuro. Un soporte que sea capaz de guardar mayor cantidad de información en el menor espacio posible. Un soporte que sea capaz de ser preservado durante años, siglos e incluso milenios. Estos investigadores quieren hacer que cualquier persona pueda tener toda su información en un átomo, en una secuencia de ADN o en cristales de cuarzo del tamaño de una moneda.